El próximo Hollywood estará en China: cómo el país planea convertirse en la nueva meca del cine

En la Tercera Conferencia sobre la Integración del Desarrollo Cultural y Tecnológico de la Franja y la Ruta, Yu Jianhong, Vicepresidente de la Academia de Cine de Beijing, presentó cómo el país asiático está construyendo su propio modelo de industrialización cinematográfica

Durante la Tercera Conferencia sobre la Integración del Desarrollo Cultural y Tecnológico de la Franja y la Ruta, Yu Jianhong, Vicepresidente de la Academia de Cine de Beijing, presentó una visión estratégica y sistemática sobre cómo el gigante asiático está construyendo su propio modelo de industrialización cinematográfica, aprendiendo de Hollywood pero sin imitarlo a toda costa.

La ponencia de Yu Jianhong no fue simplemente un análisis técnico, sino un manifiesto sobre cómo un país puede desarrollar soberanía cultural en una de las industrias más influyentes del mundo. 

Su enfoque se articula en torno a tres pilares fundamentales: 

  1. Las ocho transformaciones necesarias para la industrialización 
  2. Las cuatro etapas históricas que China ha atravesado
  3. Las cuatro estrategias para construir un sistema propio y competitivo a nivel global.

Las ocho transformaciones necesarias para la industrialización

Yu Jianhong propone que la industrialización del cine chino debe enfocarse en ocho cambios fundamentales, que son especialmente relevantes porque no se limita a copiar el modelo occidental, sino que busca adaptarlo a las características y necesidades del mercado y la cultura china.

Tipificación de productos

La clasificación de películas por géneros (comedia, romance, ciencia ficción, guerra, kung fu) no es solo una cuestión de marketing, sino una necesidad industrial. Esta tipificación permite estandarizar procesos de producción, anticipar costes y desarrollar expertise en cada género. 

China, con su rica tradición de cine de artes marciales y su creciente producción de ciencia ficción, está construyendo su propia taxonomía de géneros que respeta tanto las convenciones globales como las particularidades culturales chinas.

Estandarización de procesos

Yu Jianhong señala que Estados Unidos y Europa cuentan con procesos de producción altamente estandarizados mientras que en China, históricamente, cada equipo de rodaje trabajaba con métodos propios, lo que Yu describe como «mijo más fusil» (métodos rudimentarios). La estandarización de procesos implica que la producción cinematográfica sea más abierta, transparente y con costes más predecibles.

Algo importante en este sentido fue la creación, el 14 de noviembre de 2023, del Comité Técnico de Estandarización Cinematográfica de la Administración de Cine, algo que, aunque algunos consideran que llegó muy tarde, Yu lo ve como un punto de inflexión que permitirá convertir tecnologías en estándares técnicos de la industria y, eventualmente, en estándares nacionales.

Gestión “científica” del cine

El cine es una fusión de arte, tecnología y comercio, y su gestión debe reflejar esta complejidad. Yu destaca varios mecanismos de gestión científica que China está adoptando y adaptando:

• Sistema centrado en el productor, similar al modelo de Hollywood, donde el productor es el eje estratégico y financiero del proyecto.

• Mecanismo de garantía de finalización que aseguren que una película se termine incluso si surgen problemas durante la producción.

• Mecanismo de protección de derechos de autor, fundamental para proteger la inversión y fomentar la creatividad.

• Mecanismos de marketing y gremios, estructuras que profesionalizan la promoción y protegen los derechos de los trabajadores.

Estos mecanismos, según Yu, salvaguardan el desarrollo sano y de alta calidad del cine, evitando la improvisación y el caos que a menudo caracteriza a industrias emergentes.

Modernización de la tecnología

La tecnología digital y la inteligencia artificial son los motores de la transformación cinematográfica actual. 

Yu recuerda que, en los años 90, el cine mundial comenzó a declinar, pero la aparición de la tecnología digital revitalizó la industria gracias a los efectos especiales, el sonido envolvente o la imagen de alta definición.

Hoy, China está en la vanguardia de la tecnología virtual y los gemelos digitales, que permiten construir escenarios completos mediante ordenadores sin necesidad de locaciones reales. 

Yu señala que hemos llegado a una era en la que «las películas no se filman, sino que se hacen». La inteligencia artificial, por su parte, está abriendo posibilidades ilimitadas: puede escribir guiones, optimizar procesos técnicos, habilitar la producción virtual e incluso generar películas completas de forma autónoma.

Profesionalización, especialización, internacionalización y escalabilidad

Las cuatro transformaciones restantes se centran en el capital humano y la expansión:

  • Profesionalización del talento: formación especializada en todas las áreas del cine.
  • Especialización: empresas dedicadas exclusivamente a tráileres, estudios de mercado, efectos especiales, etc.
  • Internacionalización: expansión global de la producción y distribución china.
  • Escalabilidad de la industria: capacidad de crecer de forma sostenible y competitiva.

Las cuatro etapas: La evolución histórica del cine chino

Yu Jianhong resume la industrialización cinematográfica china en cuatro etapas:

Etapa 1: Industrialización inicial (2002-2009)

En esta etapa aparecieron Hengdian y la Ciudad Cinematográfica y Televisiva de Wuxi, dos complejos de estudios masivos que permitieron la producción a gran escala. Además, lo que fue más importante aún, se habilitaron tecnologías digitales, que democratizaron la producción y se redujeron los costes.

Etapa 2: Desarrollo acelerado (2010-2014)

El hito clave fue la construcción de la Base de Fabricación Digital de China Film en Huairou, la «nave nodriza» cinematográfica más grande del país. La Academia de Cine de Beijing también se estableció en Huairou, creando un ecosistema integrado de producción, formación e innovación.

Esta etapa también vio la cotización en bolsa de grandes compañías cinematográficas como Wanda, China Film, Shanghai Film, Bona y Huayi

Yu subraya que solo al cotizar en bolsa y securitizar activos se puede mejorar la competitividad central, tal como lo demuestran las empresas de Hollywood con valores de mercado de decenas o cientos de miles de millones de dólares.

Etapa 3: Auge de las plataformas digitales (2015-2018)

Dos fenómenos marcaron esta etapa: el auge de las compañías de cine y televisión por internet (Youku, Tencent Pictures, iQiyi Pictures) y la amplia aplicación de la tecnología de producción virtual

Las plataformas digitales no solo cambiaron la distribución, sino que se convirtieron en productoras y financiadoras de contenido, desafiando el modelo tradicional de estudios.

Etapa 4: IA y producción virtual (2019-hasta hoy)

La aplicación tecnológica de la producción virtual, junto con la aparición de la inteligencia artificial, ha proporcionado un espacio de imaginación ilimitado para toda la cadena de valor de la industria cinematográfica: creación, distribución, marketing y operación. 

Yu menciona que Hollywood ya ha producido películas generadas por IA, como The Wolf Pack (《狼群》), y que el desarrollo de AIGC (contenido generado por IA) avanza a pasos enormes.

Las Cuatro estrategias para construir un sistema propio

Yu Jianhong concluye su ponencia con cuatro estrategias para que China construya su propio sistema de industrialización cinematográfica, aprendiendo de Estados Unidos y Europa pero siguiendo un camino autónomo:

1. Fortalecer la estandarización cinematográfica

La creación del Comité Técnico de Estandarización Cinematográfica en 2023 es un paso importantísimo. 

Yu dejó claro que no solo se necesita estandarización técnica, sino también estandarización de procesos, para que la producción sea más transparente y los costes más predecibles.

2. Habilitación industrial con propiedad intelectual independiente

Yu destaca los grandes avances logrados en los últimos años. Hace una o dos décadas, todo el equipo cinematográfico en China era extranjero: efectos especiales, distribución digital, proyección. 

Hoy, China ha desarrollado tecnología propia en áreas clave:

• Tecnología de fuente de luz láser (China Film Group)

• Proyectores y sistemas de proyección de alta definición (desarrollos propios)

• Tecnología de distribución digital (China Film y los institutos de investigación)

• Estudios LED (muchos estudios de Hollywood usan productos fabricados en Shenzhen)

Yu subraya que esta tecnología no solo debe aplicarse a nivel nacional, sino también promoverse globalmente, convirtiendo a China en un exportador de tecnología cinematográfica.

3. Mecanismos de gestión científicos y racionales

Yu insiste en que no basta con enfocarse en la «tecnología dura», también es necesario proteger los mecanismos de «ciencia blanda»: producción tipificada, sistema centrado en el productor, garantía de finalización, coordinación de fechas de estreno, marketing, ventanas de distribución y protección de derechos de autor. 

La combinación de ambos puede impulsar un desarrollo tecnológico más saludable.

4. Habilitación mediante 5G, Big Data, Cloud, Blockchain e IA

La inteligencia artificial, en particular, es vista como un habilitador transversal que puede escribir guiones, optimizar procesos técnicos, habilitar la producción virtual e incluso producir películas completas de forma autónoma. 

Conclusión:

Yu Jianhong reconoce que el cine chino tiene ante sí grandes desafíos, y que la taquilla de 2025 no ha sido precisamente buena. 

Sin embargo, su exposición pone sobre la mesa la confianza no solo en el prometedor futuro del cine chino, sino su papel en la industria cinematográfica mundial.

China no busca simplemente imitar a Hollywood, sino construir un sistema de industrialización cinematográfica propio, que combine lo mejor de las prácticas internacionales con las particularidades culturales, tecnológicas y de mercado chinas. 

Tienen una hoja de ruta ambiciosa pero a la vez realista para que China se convierta en una potencia cinematográfica global, no solo en términos de taquilla, sino también de influencia cultural, innovación tecnológica y capacidad de contar sus propias historias al mundo.

La visión de Yu Jianhong coincide con la mentalidad de China a la hora de abordar la IA y la cultura conjuntamente. Para ellos la industrialización cinematográfica no es solo una cuestión técnica, sino un proyecto de civilización que requiere planificación estratégica, inversión sostenida y, sobre todo, una visión clara de hacia dónde se quiere llegar.

Y gracias a ello, en un momento en que la inteligencia artificial está redefiniendo qué significa «hacer una película» y Hollywood discute sobre ética y de derechos de autor (algo también necesario), China está posicionándose no solo como un gran mercado, sino viendo la inteligencia artificial como una herramienta que le permite convertirse en la nueva meca del cine.