La gigafactoria de baterías de Figueruelas, en Zaragoza, está un paso más cerca para iniciar su producción. El principal producto de baterías del mundo, la empresa china CATL, y el grupo automovilístico Stellantis, unidos bajo la ‘joint venture’ Contemporary Star Energy (CSE) han puesto la primera piedra de la que será la planta de baterías de litio más grande de España. Un proyecto por el que, según ha indicado el embajador de la República Popular China en España, Yao Jing, es «una de las inversiones más grandes de China en la historia en Europa». Del mismo modo, ha expresado que este megaproyecto supone una «alianza clave y un futuro muy prometedor no solo para China y España, sino para todo el continente europeo».
Está previsto que la fábrica esté a pleno rendimiento en 2030 y alcance una capacidad de hasta 50 GWh y un millón de baterías al año. No obstante, la fabricación empezará a finales de 2026 y desde 2028 la producción de la fábrica estará al 30% del rendimiento, posicionando a Zaragoza como un punto clave del desarrollo del coche eléctrico.
La primera piedra de una fábrica que contará con más de 2.000 trabajadores chinos para su construcción, se ha colocado con la presencia del ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu, el presidente de Aragón, Jorge Azcón, el embajador de la República Popular China en España, Yao Jing, el CEO de Contemporary Star Energy, Andy Wu así como con representantes del ecosistema empresarial aragonés.
Han dado así el pistoletazo de salida para un proyecto que cuenta con una inversión que ronda los 4100 millones de euros y generará unos 4000 empleos directos, lo que supone una nueva revolución para el sector en España. «Un día histórico para CSE, para Aragón y para España», han proclamado los promotores de un proyecto que se levantará junto a la actual planta de fabricación de vehículos de Stellantis en Zaragoza. Es, como esgrimen, un plan similar a la llegada de General Motors en 1980 a la misma ubicación. Una fábrica, tal y como ha resaltado Wu, «100% neutra en emisiones, alimentada por energías renovables».
«Es una apuesta segura que representa el fruto de la cooperación entre España y China, reflejo de una Europa abierta dispuesta a cooperar con el mundo, un proyecto que es fruto de la vocación de España para compartir tecnología», ha asegurado Hereu al apostar por una «estrategia compartida» con el país asiático para avanzar en el proceso de electrificación de la automoción. Azcón, por su parte, ha descrito al proyecto como «el proyecto industrial más importante que se realiza en España los próximos años».
En concreto, según recoge la memoria técnica del PIGA (Plan de Interés General), que fue aprobado definitivamente este lunes , incluye la construcción de 367.000 metros cuadrados de instalaciones sobre un total de 89 hectáreas. Esta será la tercera planta con la que la compañía china de baterías cuente en Europa, tras tener ya en marcha una en Alemania y otra en Hungría. Y llega en un momento en el que la demanda de baterías de los fabricantes de vehículos está en auge.
Esta nueva planta, cuya construcción fue anunciada en diciembre de 2024 tras la creación de la ‘joint venture’ entre ambas compañías, permitirá al fabricante de automóviles ofrecer más turismos, crossover y SUV eléctricos de batería de alta calidad», lo que reafirmará a España como uno de los principales países en construcción de automóviles, siendo ya el segundo productor de vehículos en Europa.


