China ha dado un paso adelante en cuanto al contenido que se comparte en internet y ha regulado el papel que juegan los conocidos ‘influencers’ en cuanto a divulgadores de información a través de las redes sociales. Por ello, para garantizar la calidad y veracidad del contenido de las redes sociales, cualquier cuenta que publique contenido relacionado con ciencia, salud y otras áreas especializadas como el derecho, las finanzas o la educación debe verificar la credencial médica o académica y estar afiliada a una institución reconocida, según las nuevas directrices publicada por la Administración del Ciberespacio de China a la que ha tenido acceso esta revista.
A partir de ahora, cualquier cuenta que publique contenido en estas temáticas deberá verificar su identidad profesional y acreditar su formación académica o experiencia laboral en el ámbito correspondiente. Solo podrán continuar difundiendo información aquellos perfiles afiliados a instituciones reconocidas, como hospitales, universidades o centros de investigación.
Estas medidas forman parte del documento titulado Directrices para regular el comportamiento de los medios de comunicación autónomos en el ámbito de la ciencia médica, una iniciativa que busca frenar la proliferación de desinformación y publicidad encubierta en redes sociales.
Según las nuevas normas, las plataformas digitales serán responsables de validar las credenciales de los creadores de contenido. Además, deberán asegurarse de que las cuentas muestren de forma visible y destacada información como el nombre del divulgador, su especialización profesional, la institución a la que pertenece y si se encuentra en ejercicio activo.
El objetivo es que los usuarios puedan evaluar la credibilidad y la autoridad del contenido que consumen, especialmente en temas que pueden influir en su salud, decisiones legales o finanzas personales.
Las cuentas que no acrediten formación o experiencia no podrán publicar contenido profesional en estas áreas. Tampoco se permitirá la difusión de información médica, científica o académica generada por inteligencia artificial sin un etiquetado claro que lo identifique como tal.
Asimismo, se prohíbe el uso de contenido informativo para promocionar de forma encubierta productos relacionados con la salud, como medicamentos, dispositivos médicos, suplementos o alimentos de fórmula especial. No podrán incluir en los mismos contenidos enlaces de compra, datos de contacto o referencias comerciales.
Las cuentas que no cumplan estas disposiciones se enfrentarán a sanciones progresivas que incluyen la suspensión o cierre del perfil, la eliminación de seguidores, la restricción de funciones interactivas y la cancelación de la monetización.
Con estas medidas, China busca reforzar el control sobre el ecosistema digital, garantizar la calidad y veracidad del contenido que circula en redes sociales y proteger a los usuarios frente a la desinformación y la publicidad engañosa