El puerto de Chancay, una nueva ruta comercial entre China y América Latina

Las relaciones comerciales entre Asia y Sudamérica darán a partir de este jueves un paso de gigante con la inauguración del nuevo puerto de Chancay, una infraestructura construida en Perú por Cosco Shipping, una de las empresas públicas más grandes de China y que permitirá acortar de 35 a 25 días el tiempo de transporte de las mercancías exportadas desde América del Sur al mercado asiático. Y es que en la actualidad, la mayor parte de la carga de Perú a Asia transitaba a través de América Central o América del Norte.

Pero ahora, con la reducción del coste logístico que eso conlleva, el nuevo puerto, situado a unos 80 kilómetros al norte de Lima, creará nuevas oportunidades para el desarrollo de Perú y toda la región al abrir una nueva ruta comercial con una de sus regiones aliadas. Una nueva infraestructura construida, entre otras cosas, para satisfacer la creciente integración de Perú en el comercio internacional, ya que, según el gobierno de Perú, la capacidad del puerto de Callao resultaba ya insuficiente para satisfacer esta demanda.

Este hito que dará paso a una nueva realidad de colaboración entre los países de América del Sur y China, y que convertirá a Perú en un actor clave en el comercio internacional de Iberoamérica, quedará inaugurada el jueves por el presidente de China, Xi Jinping, quien se encuentra de visita de Estado en Perú para asistir también a la 31ª reunión de Líderes Económicos del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC) en Lima.  

Y es que este megaproyecto pone de relieve las fuertes relaciones que mantienen Perú y China. 

En la actualidad, China es el mayor socio comercial de Perú, su mayor mercado de exportación y la mayor fuente de bienes importados, mientras que Perú es el cuarto mayor socio comercial de China en América Latina. En 2023, el volumen de comercio bilateral alcanzó los 37.691 millones de dólares, un crecimiento interanual del 0,8 por ciento.

Esta nueva escala de la nueva ruta de la seda en Sudamérica, que movilizará entre el 30 y el 40% de la carga nacional con destino a China y el sudeste asiático, se estima que genere un impacto económico de 4.500 millones de dólares al año, equivalente al 1,8% del PIB del país sudamericano, según estimaciones del Ministerio de Transportes y Comunicaciones de Perú. Para ello, el puerto tiene capacidad para acoger los buques más grandes del mundo con carga completa (24.000 contenedores). 

Este megaproyecto, que creará, según las estimaciones del Gobierno de Perú unos 7500 puestos de trabajo, ha conllevado además un amplio desarrollo del resto de infraestructuras del país para conectar sus principales ciudades con el puerto de Chancay. 

Así, se han construido redes ferroviarias y viales para conectar, además, con la red de otros países de la región, abriendo la puerta a que no solo sea un beneficio para Perú sino que permita también la exportación hacia China de productos de Brasil, Colombia o Ecuador, fortaleciendo las relaciones entre China y Sudamérica. Unas pretensiones que el ministro Pérez Reyes ya verbalizó hace unas semanas al visitar el desarrollo de las obras. En concreto, aseguró que con esta nueva infraestructura pretenden que Perú sea “el Singapur de Latinoamérica”.